Pacheco Rivas creció en una familia de artistas y escritores. Su madre, Ilia Rivas Espinel, era poeta y novelista, lo que influyó significativamente en su desarrollo creativo. A los diez años, presentó sus primeros trabajos en una galería de arte de la Universidad Central de Venezuela. En 1967, realizó su primera exposición individual en la Galería Isla en Caracas, titulada «Experimentaciones plásticas», que incluía 22 pinturas de tendencia abstracta.
En 1969, Pacheco Rivas se trasladó a Caracas y asistió al Taller de Arte Experimental creado por el escultor Víctor Valera. Este taller contó con la participación de otros artistas emergentes como Óscar Vásquez, Víctor Hugo Irazábal y Salvador Martínez. Durante este tiempo, abandonó la pintura abstracta e informal y comenzó a explorar la pintura cinética, aunque no obtuvo resultados convincentes.
En 1970, tras concluir el taller, continuó su formación de manera autodidacta, leyendo obras de Franz Kafka y grandes escritores latinoamericanos como Gabriel García Márquez, Julio Cortázar y Mario Vargas Llosa. En 1972, inició una serie de dibujos que representaban pliegos de papel doblados, generando formas que aludían a volúmenes y espacios.
Pacheco Rivas ha sido influenciado por una variedad de movimientos artísticos y artistas, incluyendo el modernismo y el postmodernismo. Su amistad y colaboración con otros artistas y curadores ha sido fundamental en su desarrollo artístico.
A lo largo de su carrera, Pacheco Rivas ha recibido numerosos premios y reconocimientos, incluyendo el Premio Andrés Pérez Mujica en 1974, el Premio Nacional de Jóvenes Artistas en 1975, y el Premio del jurado del XII Concurso Internacional de Arte Contemporáneo de Mónaco en 1980. Su obra ha sido exhibida en más de 300 exposiciones individuales y colectivas en todo el mundo.
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